El acero como tal es una aleación de hierro y carbono donde este último elemento se encuentra entre 0,05% y 2%. El acero adquiere una apariencia rojiza cuando se oxida por contacto con el oxígeno. En ocasiones se incorporan otros elementos como Níquel, Manganeso o Cromo, creando lo que se denominan aceros aleados.
¿Que es el Acero Inoxidable? Tipos y Propiedades
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El acero inoxidable es un material cada vez más utilizado en el mundo gracias a sus cualidades. Se utiliza en infinidad de ámbitos: construcción, automóviles, medicina, industria alimentaria…
Está compuesto principalmente de hierro, pero en su elaboración se incluyen otros elementos que darán las características y tipos del acero inoxidable.
El acero inoxidable forma parte de esta familia de aceros aleados ya que en su fabricación se incorpora Cromo en un porcentaje no inferior a 10,5%. Este elemento químico posee una gran afinidad por el oxígeno y reacciona ante él formando una película de óxido de cromo que impide que el oxígeno avance hasta alcanzar el hierro, evitando así que se oxide el acero formándose “herrumbre”.
La película que se crea con el Cromo se denomina capa pasiva. Tiene la particularidad de que se regenera. En el caso de que se produzca un daño, el oxígeno en contacto con el cromo del acero inoxidable repara la capa la protectora, devolviendo al material sus características anticorrosivas.
Como ya hemos mencionado, para que se considere un acero como inoxidable la aleación debe tener como mínimo un 10,5% de cromo. En función de la cantidad de cromo que se aplica en la aleación, se distinguen diferentes tipos de acero inoxidable.
Existen diversos tipos de acero inoxidable que se clasifican según su estructura metalúrgica: martensíticos, dúplex, austeníticos, ferríticos y de precipitación-endurecimiento; los cuales vamos a ver con más detenimiento a continuación:
Acero inoxidable austenítico
El acero inoxidable austenítico está formado añadiendo a la aleación un 18% de cromo, 8% de níquel y un mínimo contenido de carbono, menos del 0,10%. Integra las series 200 y 300 AISI, formando el conjunto con mayor número de aleaciones disponibles. Más del 70% de la producción de acero inoxidable es de acero austenítico.
Entre las características del acero inoxidable austenítico destacan:
- Excelente resistencia a la corrosión
- Endurecido en frío (no en caliente)
- Excelente soldabilidad
- Excelente higiene y limpieza
- Fácil transformación
- Es funcional a temperaturas extremas
- No es magnético
Es muy empleado en la industria farmacéutica, industria alimentaria, industria química, industria alimentaria…; debido a sus excelentes propiedades higiénicas.
Incluso dentro de este tipo podemos diferenciar dos subtipos: acero 18/18 (1.4304) y acero 18/10 (1.4301). El acero 18/18 se denomina así por incorporar un 18% de cromo y un 18% de níquel. Es muy utilizado en accesorios de acero inoxidable en aviones, hospitales, remaches… Por otra parte, el acero 18/10 se llama así por incorporar un 18% de cromo y un 10% de níquel. Es muy usado en, por ejemplo, utensilios de cocina (cubiertos, ollas, cazuelas…).
Acero inoxidable ferrítico
El contenido de cromo de los aceros inoxidables ferríticos es desde 10,5% hasta 30% con un contenido muy bajo de carbono (0,08%). Suele ser un acero inoxidable más barato. Pero esto no quiere decir que tenga peores cualidades. Estos aceros inoxidables mantienen una estructura ferrítica estable desde la temperatura ambiente hasta su punto de fusión. Tiene distintas variantes en función de la incorporación de nuevos elementos en su aleación como molibdeno, aluminio, silicio, titanio y niobio.
Forman parte de la serie 400 AISI y sus características principales son:
- Resistencias a la corrosión buena o moderada, dependiendo del contenido de cromo utilizado.
- Endurecimiento moderado por frío.
- No tiene buena soldabilidad.
- Es magnético.
- De manera habitual se le aplica un tratamiento de recocido para mayor suavidad, durabilidad y resistencia a la corrosión.
- Su uso se limita a procesos de formado en frío.
El acero inoxidable ferrítico es menos fuerte y menos resistente que el acero inoxidable austeníticos. Sin embargo tiene unas propiedades mejores para la ingeniería. Su uso está muy extendido en aplicaciones para automóviles, electrodomésticos y utensilios de cocina o en equipos industriales. Al tener peor soldabilidad su uso en construcción está muy acotado porque sólo se aplican en grosores muy delgados.
Acero inoxidable martensítico
Los aceros inoxidables martensíticos están compuestos entre un 11,5% y un 18% de cromo. Tienen una proporción superior en carbono hasta 1,2%. Se llaman así porque tienen una estructura metalográfica de martensita (ferrita deformada de carbono que no pudo fundirse).
Al igual que los aceros inoxidables ferríticos, forman parte de la serie 400. Sus principales características son:
- Resistencia a la corrosión moderada.
- Endurecimiento por tratamiento térmico. Alcanzan altos niveles de resistencia mecánica y dureza.
- Son magnéticos.
- Son soldables gracias a su alto porcentaje de carbono y a su dureza.
Entre sus destinos destacan: hojas de cuchillos, cubertería, instrumentos quirúrgicos, válvulas, ingeniería química.
Acero inoxidable dúplex
Estos aceros inoxidables están compuestos por una aleación de cromo (18% – 26%), níquel (4.5% – 6.5%) y una serie de elementos entre los que se encuentran el nitrógeno, silicio, tungsteno, molibdeno o cobre; haciendo que su dureza sea aún mayor.
Se denomina “dúplex” porque tienen proporciones iguales de ferrito y austenita. Gracias a esta composición, el acero inoxidable dúplex tiene las siguientes características:
- Gran resistencia a la corrosión.
- Es uno de los aceros más resistentes, tanto por fatiga como por tensión.
- Es magnético.
- Gran resistencia a la tracción, superior al acero normal.
- Fuerza mecánica muy elevada.
- Muy manejable y fácilmente soldable.
- No se puede aumentar su dureza mediante tratamientos térmicos.
Debido a sus excelentes prestaciones en cuanto a dureza y resistencia, es uno de los principales materiales en la fabricación de piezas industriales. Es un material muy versátil presente en industrias (ventiladores, impulsores, ejes…), refinerías (tanques, tratamientos de gases…), construcción (puentes, pilares…) o industria alimentaria.
Acero inoxidable endurecido por precipitación
Los aceros inoxidables endurecidos por precipitación se diferencian del resto por la inclusión de elementos en su aleación como aluminio, titanio, molibdeno y cobre. Mediante un proceso de tratamiento térmico se forman compuestos intermetálicos internos que aumentan la resistencia y dureza del material.
Contienen una cantidad de cromo y níquel similares a los aceros austeníticos y martensíticos. Dentro de este tipo de aceros inoxidables endurecidos por precipitación el más común es el denominado 17-4PH (acero recocido 630), con un contenido de cromo del 17%, un 4% de níquel, 4% de cobre y 0,3% de niobio.
Las características principales de este acero inoxidable son:
- Buena resistencia a la corrosión.
- Alta resistencia a la tracción en caliente.
- Dureza, resistencia mecánica y límite de elasticidad altos.
- Aumento de propiedades mecánicas mediante tratamiento térmico.
Dentro de sus aplicaciones destacamos la fabricación de álabes de turbinas, piezas de motores de aviones o la fabricación de engranajes.
Comparativa de Aceros Inoxidables
Tipo Acero -> | Austenítico | Ferrítico | Martensítico | Endurecido por precipitación | Duplex |
---|---|---|---|---|---|
Resistencia a la corrosión | Alta | Media | Media | Media | Muy alta |
Respuesta magnética | Generalmente no | Sí | Sí | Sí | Sí |
Soldabilidad | Muy alta | Baja | Baja | Alta | Alta |
Resistencia a altas temperaturas | Muy alta | Alta | Baja | Baja | Baja |
Resistencia a bajas temperaturas | Muy alta | Baja | Baja | Baja | Media |
Ductilidad | Muy alta | Media | Baja | Media | Media |
Ritmo de endurecimiento | Muy alto | Medio | Medio | Medio | Medio |
Endurecible | En frío | No | Por templado y enfriado | Por envejecimiento | No |
Propiedades del acero inoxidable
- Resistente a la corrosión: El acero inoxidable tiene una característica única que lo hace diferenciarse del resto de materiales de acero y que por lo tanto adquiere un valor añadido: el acero inoxidable se autorrepara. Como ya hemos visto anteriormente, gracias a los elementos de aleación de composición del acero inoxidable, crean una delgada capa transparente sobre la superficie denominada capa pasiva. Esta capa pasiva hace que si en algún momento el acero inoxidable se raya o sufre algún tipo de daño, la película formada por óxido de cromo realiza una función reparadora sobre la superficie ya que la acción del oxígeno unida a los átomos del espesor hacen que esta quede como nueva por acción propia. Esto explica por qué el acero inoxidable no necesita ningún recubrimiento ni otro tipo de protección anticorrosiva para mantener limpia la superficie de acero inoxidable, incluso después de décadas de uso.
- Durabilidad: El acero inoxidable es un material muy duradero. Sus capacidades físicas y químicas provocan que el acero inoxidable pueda aguantar sin deteriorarse más de 60 años, mucho más que el acero normal que empieza a mostrar síntomas de deterioro a partir de los 15 o 20 años.
- Dureza: Es un material que no se raya y que resiste a los agentes abrasivos. Dependiendo de la cantidad de carbono que tenga, más duro será el material.
- Tenacidad: Resiste con una alta capacidad los golpes. Es capaz de absorber una gran cantidad de energía sin romperse cuando recibe un impacto
- Ductilidad: Ejerciendo la fuerza adecuada, se puede deformar con facilidad.
- Sostenibilidad: Todos los aceros inoxidables son reciclables. En la fabricación actual, los nuevos aceros inoxidables proceden en un 60% de material reciclado.
- Higiénico: Debido a su baja rugosidad, los agentes externos como bacterias y suciedad no se adhieren a la superficie facilitando así la limpieza del material.
- Estético. Se puede utilizar este tipo de acero en distintos acabados: mate, brillante o grabado, por lo que el acero inoxidable puede utilizarse como elemento de la estructura del edificio como en la decoración de los interiores. De esta forma, contiene una variedad de estilos, lo que es muy adecuado para el interior y exterior de edificios modernos, así como para la restauración de edificios antiguos.
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